LA PESTE

El aleteo de una mariposa provocó un huracán que ni el mismo dios podía detener. La soberbia del poder y el dinero del ser humano se hicieron  trizas en tiempos de la pandemia. Todos fueron un pedazo de vidrio atravesado por una bala invisible. La plaga no está hecha a la medida del hombre, por lo tanto , se vio como algo irreal ,como una pesadilla que tiene que pasar Sin embargo, los cadáveres estaban  allí, en las veredas , en las calles, en las camas , en la arena  bajo el sol y el hedor de la putrefacción los hacía ser un pequeño punto en el universo..